2014. Noviembre, mes de los Santos y de los difuntos.
Tumba de Ismael de Tomelloso cada año con más flores.
El Prepósito General de los Teatinos, Padre Valentín Arteaga, Postulador de la Causa del Siervo de Dios Ismael de Tomelloso, nos ha regalado la biografía de san Josémaria Tomasi, escrita por el Padre Antonio Oliver, subtitulada “El hombre, el sabio, el santo” (Biblioteca de Autores Cristianos,1986). En su original "Introito" cuenta con maestría y poesía las últimas horas de la vida del santo citando unas palabras, apropiadas en este mes, que pronunció:
«Y si es la muerte la que llega, tendrá poco que matar en mí; ¡le he visto la cara tantas veces!. En mí hará un mal negocio».
Una exclamación dicha por por un santo que ha visto muchas veces durante su vida la cara de la muerte. La muerte de sí mismo. El hombre que renunció a las riquezas y a los honores que le correspondían, como heredero de la fortuna del Gatopardo y del Príncipado de Lampedusa, a cambio de ser pobre, puro y obediente en la Orden de los Teatinos.
Urna con la reliquia de su cuerpo en Roma, Basílica de San Andres del Valle.
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En el mes de noviembre se celebran varias fiestas de la Virgen María, inmaculada, pobre y obediente; entre la Almudena (día 9) y la Milagrosa (día 27) se celebra la Presentación de la Virgen María , en el templo de Jerusalén, de la mano de sus padres, Joaquín y Ana (día 21).
También se celebran varios santos este mes: El 13 de noviembre San Leandro (534-600), Arzobispo de Sevilla, hijo de madre visigoda convertida al catolicismo. Tuvo cuatro hijos santos, San Leandro, San Fulgencio, Santa Florentina y San Isidoro. Leandro fue el apóstol que convirtió al catolicismo a Hermenegildo, hijo del Rey de los visigodos, Leovigildo, que era arriano, y contrariado por la conversión de su hijo, le mandó matar. Hermenegildo prefirió la muerte al trono que iba a heredar de su padre, con tal de no renunciar a su fe y fue mártir y santo. El Rey Leovigildo, persuadido por las injusticias que había cometido con su hijo y por haber ordenado el destierro de Leandro fuera de España, le hizo regresar y le encargó la educación de su hijo Recaredo, quien con sus ministros y gobernadores y con los jefes arrianos se convirtieron al catolicismo. A partir de entonces la religión católica fue la religión personal y oficial de España, sin que deba olvidar que el cristianismo fue predicado en la península ibérica, hasta Finisterre, el Fin de la Tierra conocida, por el apóstol Santiago quinientos años antes en los tiempos de Cristo.
El Siervo de Dios, Ismael de Tomelloso, heredero de esa misma fe, nació en la tierra en la que han convivido las tres religiones monoteistas, y siguen conviviendo las tres culturas que han conformado Europa y gran parte de la humanidad.
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El Papa que entregó su vida por la Iglesia, por los frutos del Concilio Vaticano II
El Beato Pablo VI el 8 de diciembre de 1975 nos obsequió con la Exhortación Apostólica “Evangelii Nuntiandi”, fruto de la III Asamblea General del Sínodo de los Obispos de 1974, sobre la evangelización en medio del mundo, en los tiempos fuertes y de sufrimiento que padeció aquellos años por la Iglesia de Jesucristo. Gran contraste cuando el 9 de mayo de 1975, siete meses antes, había publicado la Exhortación Apostólica “Gaudete in Domino”, sobre la alegría cristiana, que el Papa Juan Pablo II hace suya en la Conferencia General del Episcopado Latino Americano que tuvo lugar en Puebla-Méjico en 1979.
El actual Papa Francisco, que tantas veces había citado y había vivido el contenido de ambas Exhortaciones como Arzobispo de Buenos Aires, nos ha regalado su primera Exhortación Apostólica, titulada “Evangelii Gaudium – La alegría del Evangelio”- que dio a conocer el 24 de noviembre de 2013, en el primer año de su Pontificado.
En su penúltimo punto,286, dice que "María sabe transformar una cueva de animales en la casa de Jesús, con unos pobres pañales y una montaña de ternura", y concluye. punto 287, con con una hermosa oración " A LA MADRE DEL EVANGELIO VIVIENTE....MARíA, LA ESTRELLA DE LA NUEVA EVANGELIZACIÓN."
Pablo VI fue el primer Papa que viajó a Tierra Santa el 4 de enero de 1964, donde se estrechó en un abrazo fraternal con el Patriarca Atenágoras de Constantinopla con el que mantuvo dos encuentros que han abierto un diálogo ecuménico sin precedentes.
El Papa Pablo VI y el Patriarca Atenágoras se abrazan y concelebran juntos en Jerusalen.
El mes de mayo de 2014 el Papa Francisco, con motivo del 50 aniversario de la visita de Pablo VI a Tierra Santa, visitó Jerusalen y se reunió con el Patriarca Bartolomé.
El hoy beato Pablo VI, el Papa de la Paz, de la Caridad, de la Libertad Religiosa, de la Unidad de los cristianos, de la Unidad con los judíos y con los musulmanes, el Papa que llevó el duro peso del Concilio Vaticano II, cuyas inspiraciones han seguido sus sucesores y sucesores de Pedro, DESCANSA EN PAZ.
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Multimedia
Avance resumen del video sobre el Siervo de Dios Ismael de Tomelloso, grabado en escenarios reales.
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