A continuación, José Vicente Cepeda Plaza, Delegado de la Asociación en Madrid toma la palabra para explicar las actividades que han tenido lugar en Madrid desde que se constituyó la Asociación:
« El 23 de mayo de 2013, fiesta de Jesucristo Sumo y Eterno Sacerdote, en el Seminario Conciliar de Madrid se presentó a Ismael de Tomelloso, en un acto de la Asociación para la Beatificación y Canonización de Ismael de Tomelloso, presidido por el Excmo. y Rvdmo. Mons. César Franco, Obispo Auxiliar de Madrid, con intervención del Vicario Episcopal para la Vida Consagrada de la Archidiócesis de Madrid, Ilmo. y Rvdmo. Mons. Joaquín Martín Abad, cuyas intervenciones parciales están colgadas en la página web www.ismaeldetomelloso.com.
El domingo día 16 de junio, en el programa “Más Qué Noticias” de 13 TV se nos dio la oportunidad de exponer la vida de Ismael, pues don Javier Alonso, que dirige y presenta el programa, se había mostrado muy interesado en conocer detalles de la vida de Ismael de Tomelloso, hasta el extremo de que en programas posteriores, dos veces hizo mención a Tomelloso, lo mismo que uno de los invitados. A principios del mes de mayo, en un programa de radio en la COPE, que también dirige y presenta don Javier Alonso, también se pudo dar a conocer la vida de Ismael de Tomelloso.
El 20 de junio en la Basílica de La Milagrosa, en Asamblea General, se eligieron los miembros de la Junta Directiva y Delegado de la Asociación en Madrid, con asistencia de Martín Molinero Novillo, hermano de Ismael, Tomás e Ismael, sobrinos de Ismael de Tomelloso.
Hay que destacar y agradecer la gran disposición y colaboración del Padre Juanjo González, párroco de la Basílica de La Milagrosa, a la que tanta devoción tenía Ismael, y sigue velando por la buena marcha de la Causa de Beatificación del Siervo de Dios.
Los días cinco de cada mes, al igual que hacen en Tomelloso y en Zaragoza, se celebra la misa, generalmente a las siete de la tarde, por el Padre Juanjo, en la que los miembros de la asociación reciben la bienvenida, y en el momento de las preces, o al principio o al final de la misa, explica el párroco las funciones de la Asociación y la vida del Siervo de Dios.
Aprovechando que estamos en una de las ciudades que más iglesias existen en todo el mundo; no sé si únicamente es superada por Roma, o incluso está por encima de Roma, todos los meses, los miembros de la Asociación en Madrid depositamos en las parroquias más cercanas a nuestros hogares y centros de trabajo estampas u hojas informativas, percibiendo cómo desaparecen en poco tiempo. Ismael vuela hacia las carteras o bolsos de los feligreses. Dos vocales de la Junta que trabajan en hospitales dejan las estampas de Ismael. Incluso, también hay que decirlo, hemos tenido un contacto con un diácono que ejerce la pastoral en uno de los tanatorios de Madrid al que se le ha hecho llegar estampas para depositarlas en el lugar más propicio.
No voy a dar pormenores del favor recibido en mi familia, porque está publicado como favor y es relacionado con una enfermedad. Os contaré: mis hijas y yo nos encomendamos a Ismael para que todo saliera bien. Se trataba de una intervención quirúrgica por medio. Y concluyo con el comentario que nos hizo el especialista el día que fuimos a la consulta. Un hombre ya entrado en años, peinando canas, con años de experiencia en medicina: “A lo largo de mi vida profesional es el primer caso que he conocido. Ha habido mucha, mucha, mucha suerte.” Era el comentario que queríamos escuchar para conocer que Ismael nos había hecho un favor grande
Tenemos impreso un tríptico de parecidas características al que se ha hecho por la Delegación de Zaragoza, con el fin de seguir dando a conocer la vida de Ismael.
Para concluir esta exposición, vuelvo al Seminario de Madrid donde se presentó la Asociación. Don César Franco, cuando pasó a mis hijas repartiendo estampas y hojas informativas a cada uno de los asistentes le dijo por separado: “¿Y tú, vas a ser santa?”
En eso consiste nuestra vida. En buscar la santidad. Juan Pablo II en una carta de difícil pronunciación invitaba a ser parte de estas Asociaciones para caminar hacia la santidad.
No tenemos otro empeño. Tenemos un santo cercano como Ismael. Ha vivido en las calles de Tomelloso, ha compartido una familia, tiene padres, hermanos, sobrinos, amigos como nosotros. Es un cristiano con fama de santidad muy cercano. »
Presentación de la Asociación para la Canonización del Siervo de Dios Ismael de Tomelloso en el Seminario Conciliar de Madrid.
SEMINARIO CONCILIAR DE MADRID
El 23 de mayo de 2013, festividad de Jesucristo Sumo y Eterno Sacerdote, se ha presentado la Asociación para la Canonización del Siervo de Dios Ismael de Tomelloso en el Seminario Conciliar de Madrid, bajo la presidencia del Excmo. y Rvdmo. Ms. César Franco, Obispo Auxiliar de Madrid, con intervención del Vicario Episcopal para la Vida Consagrada de la Archidiócesis de Madrid, Ilmo. y Rvdmo. Ms. Joaquín Martín Abad.
Se inició el acto con la exhibición de un breve DVD sobre la vida del Siervo de Dios, que fue explicado por el Presidente de la Asociación y Vicepostulador de la Causa de Canonización.
Agradeció al Señor Cardenal Arzobispo de Madrid, Ms. Antonio María Rouco Varela y al Rector del Seminario Conciliar que hubieran permitido la presentación del Siervo de Dios en este lugar porque Ismael había confesado al capellán del Campo de Concentración de San Juan de Mozarrifar, don Ignacio Bruna, cuando se vio próximo a morir, su deseo de ser sacerdote según escribió el Operario Diocesano don Clemente Sánchez en la Revista Dominicana «la Vida Sobrenatural» desde Tucuman (Argentina) en 1942, con los testimonios directos y escritos que recibió de don Ignacio Bruna y de la enfermera, Aurora Álvarez, que asistió a Ismael en el Hospital Clínico de Zaragoza hasta su muerte…
Palabras de Ms. Joaquín Martín Abad.
Comenzó recordando el acto de presentación del libro de la vida de Ismael «IN SILENTIO…», en la Fundación Universitaria San Pablo CEU, por el señor Cardenal-Arzobispo de Madrid a quien dio las gracias por haber dado permiso y consentimiento para que la Asociación pueda hacer apostolado en Madrid como antes en Ciudad Real y en Zaragoza.
Y continuó haciéndose la pregunta siguiente: «¿Por qué estoy aquí, siendo Vicario de la Vida Consagrada? Primero, porque Sor María Molinero Novillo, Hermanita de los Ancianos Desamparados, hermana de Ismael, un día que fui de visita como Vicario a la casa de Aravaca, y es la primera vez que me enteré de quién era Ismael, me dio esta biografía; me habló de la Acción Católica y de su hermano Ismael y me escribió una nota diciendo qué podríamos hacer, o la Acción Católica que podría hacer, por Ismael.
Palabras de Ms. César Franco Martínez Obispo Auxiliar de Madrid
Clausuró el acto el Señor Obispo Auxiliar Ms. César Franco Martínez con las siguientes palabras:
«En el plan de la Providencia, las casualidades no existen, existe lo que llamamos en teología la Providencia.
Me alegro mucho de presidir este Acto en nombre del Sr. Cardenal y les transmito a todos su saludo y su afecto. Les voy a dar algunas casualidades más para que las apunten en su agenda.
Me alegro mucho, primero, porque don Clemente Sánchez, cuando leí la biografía, fue el párroco, mejor dicho, el Rector de la iglesia donde vivían mis padres, que luego fue constituida parroquia. Fue el Rector con el que yo fui después al Seminario; él era Operario Diocesano y quería que yo fuera Operario, pero tenía una intuición de que yo lo que quería ser era cura, pero vamos… no se rompieron las relaciones por aquello.
Con la presentación de la Asociación en Madrid, que también ha coincidido dentro del mes de mayo, se ha abierto la puerta al mes consagrado al Sagrado Corazón de Jesus.
<<"El esfuerzo de recuperar su memoria y hacerlo justamente en el año de la JMJ es más que laudatorio, es muy espiritual, probablemente hay una acción del Espíritu detrás de esta recuperación de la memoria de este joven. Por tanto es la recuperación de un santo. Y un santo joven, del primer tercio del siglo XX, décadas dramáticas no sólo en España sino en toda Europa. De una juventud que le tocó vivir una hora histórica, para los que tenían fe, como una hora de martirio. La recuperación de este muchacho es una recuperación típica de un joven de España, de la España de entonces, para la España de hoy. Si, no fue mártir en el sentido cruento de la expresión, pero vivió martiriálmente. Quizá sea la expresión que se adecúa a la realidad de la biografía de este muchacho. Vivió martirialmente. Esa elección del silencio por Cristo, ese acogerse a la Cruz de esa forma y de esa fórmula, muy generosa, muy oblativa, muy en la línea de la Cruz de Cristo, hace de su vida, primero, de testigo y testimonio de la bondad, y del amor y de la redención que vienen del señor para sus jóvenes compañeros del ejército popular, pero también una invitación a los jóvenes del otro lado para vivir su victoria de una forma también reconciliadora y llena de misericordia y de compasión, y de amor del Señor. Evangeliza por un lado y evangeliza por el otro.">>
El Padre Florentino del Valle, de la Compañía de Jesús, primer biógrafo del Siervo de Dios en los años cuarenta, con el título: «Ismael de Tomelloso. La lección de su silencio», el 19 de junio de 2009, a los 101 años, hizo estas declaraciones:
<<"…unos de los misterios de Ismael, es ese silencio que guarda y que quiere imponer en aquellos a los cuales se ha abierto… hay un pequeño enredo entre el silencio y el hablar, por una parte es el silencio, un silencio que lo pide Ismael a aquellos con quienes ha hablado. Yo creo que falta la explicación de por qué Ismael se inclina al silencio de esa manera, ¿por qué? Ahí detrás, en el fondo, hay algo que no ha quedado a mi entender, ni está totalmente aclarado ¿Por qué esa imposición? ¿Por qué ese silencio? ¿Por qué la imposición del silencio? ¿Por qué? Ese por qué no tiene, que yo sepa, hasta ahora explicación total y absoluta." >>
El capellán del Campo de Concentración de San Juan de Mozarrifar, en Zaragoza, Don Ignacio Bruna, que fue llamado por Ismael para que le administrara el sacramento de la Confesión cuando estaba próximo a morir, rompiendo por primera vez su silencio, dejó escrito el año 1938 lo siguiente:<<" Ahora, como recuerdo y para ejemplo de los jóvenes católicos, contemplemos la flor sin deshojarla; ya nos deparará Dios ocasión de abrir el búcaro de su santa vida y gloriosa muerte para recrear al mundo con sus más delicadas esencias".>>
El P. Valentín Arteaga, Postulador de la Causa de Canonización y Prepósito General de los Teatinos dice: <<" Justamente encuentra que el silencio va a ser su Cruz; el madero de su cruz es el silencio">>
Ms Algora Hernando, ha dicho: <<"…en el hospital es donde cuaja Ismael su entrega de la vida, identificándose con Jesucristo en la Cruz…" …que en la Jornada Mundial de la Juventud Juan Pablo II tuviera la inspiración de ofrecer la Cruz desnuda a los jóvenes,… y que viene a nuestra diócesis…Perdonad la emoción, pero viene a Tomelloso, viene a la tumba de Ismael al cementerio. Es nuestro pequeño homenaje a un hombre que ha dado su vida por Cristo. Y desde Jesucristo se ven las cosas con una claridad impresionante, e Ismael las vio. Las vio y dio una respuesta.">>
En la Exposición se ha ofrecido una oportunidad de descubrir la vida del Siervo de Dios Ismael de Tomelloso y participar de su silencio.
Parroquia Nuestra Señora de los Ángeles donde se celebra la exposición.
El Obispo Prior de Ciudad Real Monseñor Antonio Algora, a la derecha, con el Vicario para la Vida Consagrada del Arzobispado de Madrid, Monseñor Martín Abad, en la inauguración de la exposición.
Cantando a Nuestra Señora de los Ángeles, el día de la inaguración, víspera de su festividad.
El Obispo Auxiliar de Madrid, Monseñor Fidel Herráez, ante la Cruz de la Tumba de Ismael en el cementerio de Zaragoza, con Jesús Cañas Director de la exposición.
Gracias Santo Padre Benedicto XVI,por haber estado con nosotros en Madrid durante todos los días de la Jornada de Mundial de la Juventud de Madrid en Agosto de 2011.
Gracias al Cardenal Arzobispo de Madrid, Monseñor Antonio María Rouco Varela, presidente de la Conferencia Episcopal Española y al equipo encargado de la organización de la JMJ, por el trabajo que han realizado con tanta generosidad y éxito.
Gracias al Cardenal Arzobispo de Madrid, Monseñor Antonio María Rouco Varela, por haber presentado la biografía del Siervo de Dios Ismael de Tomelloso, «IN SILENTIO…» en la Universidad San Pablo CEU de Madrid.
Gracias al Señor Obispo Prior de Ciudad Real, Monseñor Antonio Algora Hernando y al equipo diocesano Pastoral de la Juventud, por haber llevado la Cruz de la JMJ, la Cruz de los Jóvenes, la Cruz del Papa Beato Juan Pablo II, que ha recorrido los cinco continentes, a la tumba del Siervo de Dios Ismael de Tomelloso; primera vez que la Cruz de la JMJ, ha entrado un cementerio; por haber elegido la Parroquia de Nuestra Señora de los Ángeles de Madrid como punto de encuentro y de acogida de los jóvenes peregrinos de la diócesis.
Por haber inaugurado el 1 de agosto la exposición sobre la vida del Siervo de Dios, Ismael de Tomelloso, en la Parroquia de Nuestra Señora de los Ángeles.
Nuestro agradecimiento al Santo Padre, Benedicto XVI, porque con su gesto y con su palabra, con su sonrisa y con su alegría, ha conquistado el corazón de millones de jóvenes, y muy especialmente le queremos agradecer el regalo personal que nos ha hecho del YOUCAT.
Gracias Santo Padre, por la lección del silencio que nos dio en el parque del Retiro de Madrid, confesando a los jóvenes en el confesonario, señalando el camino de la misericordia, la penitencia, el perdón y la alegría para la purificación del templo de Dios que son los jóvenes del siglo XXI.
Por la lección del silencio que nos dio en el Vía Crucis del Paseo de Recoletos de Madrid, acompañado de miles de jóvenes que le esperaban rezando el rosario desde las primeras horas de la mañana, soportando el peso del bochorno.
Por la lección del silencio que nos dio en la tormenta, después de la tormenta y durante la contemplación y adoración del Santísimo Sacramento, rodeado de una muchedumbre como quizás no haya habido jamás otra en la historia de la humanidad con tantas almas adorando al Señor en silencio;
por la lección del silencio que nos dio enseñándonos la Comunión Espiritual, al no haber sido posible distribuir la sagrada comunión por haber volado la tormenta las capillas destinadas a guardar reservado el santo sacramento de la Eucaristía.
GRACIAS, SANTO PADRE QUERIDÍSIMO: HASTA LA JMJ-RIO 2013, EN EL GRAN CONTINENTE AMERICANO, DONDE ESPERAMOS RECIBIRLE MÁS JOVENES QUE NUNCA. GRACIAS.
«El esfuerzo de recuperar la memoria de Ismael de Tomelloso y hacerlo justamente en el año de la JMJ es muy espiritual, probablemente hay una acción del Espíritu detrás de esta recuperación de la memoria de este joven.
Por tanto, es la recuperación de un santo. Y un santo joven, del primer tercio del siglo XX, décadas dramáticas no sólo en España, sino en toda Europa. De una juventud que le tocó vivir una hora histórica, para los que tenían fe, como una hora de martirio.»
EUROPA PRESS
El Cardenal-Arzobispo de Madrid Ms. Antonio María Rouco Varela, destaca que Ismael de Tomelloso «es un ejemplo para los jóvenes del siglo XXI, tentados por carencias profundas e insatisfacción espiritual»
análisis digital.
El presidente de la Conferencia Episcopal Española y arzobispo de Madrid, cardenal Antonio María Rouco Varela, presentó ayer el libro Ismael de Tomelloso, «In silentio…», obra del ex diputado de UCD Blas Camacho, en la Universidad CEU San Pablo. En el acto, participaron también el vicario de Madrid para la Vida Consagrada, Joaquín Martín Abad, el autor de libro y el presidente de la Fundación Universitaria San Pablo CEU, Carlos Romero
En la presentación, que comenzó con la proyección de un video sobre la vida de Ismael de Tomelloso, el cardenal Rouco señaló que el esfuerzo de Blas Camacho por recuperar la memoria del joven de Tomelloso, además en el año en el que se celebra en Madrid la Jornada Mundial de la Juventud, «es muy espiritual».
Para el cardenal se trata de «la recuperación de un santo del primer tercio del siglo XX», una época en la que «a la juventud que tenía fe, le tocó vivir una hora histórica como una hora de martirio». Así, se preguntó si es un modelo para los jóvenes del siglo XXI y respondió afirmativamente porque «los jóvenes del siglo XXI son tentados, muchas veces, por el poder, por un estilo de vida, una visión materialista de la vida, carencias profundas a la hora de situarse en el camino del presente y futuro de sus vidas y por la insatisfacción espiritual».»Les falta horizonte y también camino», añadió. A su juicio, «la forma de encontrar el camino es volver la mirada al interior, a Dios».
Dijo también que «el modo en como aborda Ismael la historia de su vida, es algo que en el fondo del alma de todos los jóvenes también está latente: amando de verdad, hasta el final, con la fuerza de Dios». Por ello, su ejemplo servirá a los jóvenes del mundo actual, «es un joven de entonces para la España de hoy».
Destacó, además, que «no fue mártir pero vivió martirialmente y que esa elección del silencio por Cristo, acogerse a la Cruz de esa forma tan generosa y oblativa, hace de su vida una vida de testigo y testimonio de bondad y amor para sus compañeros y, también, una invitación a los del otro lado para vivir su victoria de una forma reconciliadora».
Sobre la acción católica, manifestó que la juventud de aquellos años «buscaba un camino nuevo para España». En esta línea, «recuperar la vida de Ismael es de un gran acierto». Concluyó mostrando su deseo de que el proceso beatificación alcance la fase de aprobación de las virtudes heroicas y que pueda llegar a ser santo.
Modelo de santidad para la vida cristiana
El vicario de Madrid para la Vida Consagrada, Joaquín Martín Abad, subrayó que el libro «In Silentio», está escrito por un seglar, Blas Camacho, que recoge la biografía de un joven de Tomelloso, nacido en «un pueblo que quiere un santo».
Así, destacó que después de la muerte del joven Ismael se publicaron muchas informaciones sobre él, aunque reconoció que «en los últimos años, éstas se habían sumido en un ‘silencio’, igual que el que él escogió al final de su vida». En este sentido, puso de manifiesto que, de ser proclamado santo, «sería un joven sin escritos», ya que sólo se conservan cartas, en las que «no se encuentra nada fuera de la fe». «En ellas aparece un buen estilo de comunicar, su gran amor a la familia, el olvido de sí mismo, su capacidad para superar las dificultades…».Su vida giraba en torno a que «al final, todo lo dispone Dios».
«Ismael era un chico que en el conocimiento de la Acción Católica, decidió ser todo de Dios», declaró. Tb destacó el ambiente hostil a la religión en aquel momento, al que, sin embargo, «él ponía paz entre los soldados» y concluyó mostrando su deseo de que sea propuesto «como modelo de santidad para la vida cristiana y como ejemplo para asociación católica y otros movimientos».
Ismael «me está cambiado»
Blas Camacho, partió en su intervención del «destino heroico de Ismael, como para haber sido guardado ‘in silentio'». «Ismael me está cambiando», dijo.
Según destacó, en el silencio reside la Cruz «en la que Ismael se quiso crucificar, imitando a Jesucristo. Ese, añadió, es el testimonio de su Cruz». «Y sobre la Cruz», añadió, «Ismael de Tomelloso es un ejemplo para anunciar y enseñar el camino de la Conversión, la Confesión y la Comunión». «Vivió entregado a Dios, esta es la lección que nos está trasmitiendo continuamente», añadió. «De la crisis actual, moral y religiosa, no se puede salir sin esperanza y esto le ayudo a comprenderlo la Encíclica Spe Salvi de Benedicto XVI», que aconsejó leer a todos.
En el acto participaron también el presidente de la Fundación Universitaria San Pablo CEU, Carlos Romero, y Natividad Cepeda, Secretaria de la Asociación.
Ismael Molinero Novillo, un joven de Acción Católica de Tomelloso. Fue movilizado por el ejército republicano en la guerra civil y participó en las batallas de Teruel, donde fue preso. Enfermo de tuberculosis, fue trasladado al hospital clínico de Zaragoza, donde falleció con veintiún años. Consciente de que su enfermedad era irreversible, prefirió el silencio, la soledad y el sufrimiento por amor a Dios. Se sinceró con el capellán que le asistía en el Hospital de Zaragoza y le confesó su aceptación de la muerte o si sobrevivía su deseo ser sacerdote.